martes, marzo 27

Otro cumpleaños, otra primavera...

Repentinamente, aunque esperada, llegó la primavera. Al menos eso dice el almanaque, porque las previsiones meteorológicas siguen anunciando lluvias, vientos y demás fenómenos que nos van a aguar las fiestas, sobre todo a los que esperan la Semana Santa para disfrutar del espectáculo, a medio camino entre lo profano y lo religioso, que tenemos en Andalucía. 
Y como siempre, un año más a mis espaldas. Mi carnet de identidad dice que los cumplo el día 25, pero mi madre, que es la que lo sabía con certeza, siempre dijo que nací el día 22, mientras mi padre asistía a la procesión de Viernes Santo, que ese año también cayó en marzo. Así que ya son 70… ¡Ostras, qué mayor! Ahora ya puedo decir que voy para vieja, sin remedio. 

jueves, marzo 15

El mandil de mi amiga Ángeles


Querida Ángeles: Decía el poeta Ángel González que escribir es siempre reescribir, volver a decir lo que han dicho otros, aunque con una luz nueva y una voz que siempre es única. Y es verdad, pero a mí me da un poco de reparo repetir lo que tanta gente ha dicho estos días, en los que todo hijo de vecina ha opinado algo sobre la huelga feminista. Sin embargo, esta mañana, cuando recogía la ropa del tendedero he visto tu mandil y esa imagen me ha llevado a escribirte esta carta, que como otras, será una carta sin respuesta. ¿Recuerdas aquel mandil tan bonito que me bordaste hace ya algunos años? Me emociona ver esos dibujos que representan mi vida: una imagen femenina leyendo un libro y alrededor de ella objetos del mundo doméstico; todo lo que suele haber en una cocina. Así me veías tú, amiga, y seguramente era así más que ahora, que peino canas y mi cotidianeidad es completamente diferente.