sábado, abril 16

Un viaje de ida y vuelta

El taxi de Ramón el de “Chuchina” nos trasladó a la estación de Baeza, el lugar más cercano donde llegaba el tren. Emprendí esa aventura acompañada de mi padre. Con nosotros iban otras dos personas: al mayor le llamaban Francisco el de "El Chatillo". Una de sus hijas era muy amiga mía, pero ella se quedaba en el pueblo con su madre y su hermana, hasta que el padre encontrara trabajo y vivienda. El otro, era un muchacho algo más joven que yo, de la familia de los Valdivia. No recuerdo nada más sobre él y tampoco tengo ni idea de por dónde anda.

miércoles, abril 6

Manolo Tena: un hombre triste y desvalido


Manolo Tena. Nunca he visto a alguien tan triste, tan vulnerable, tan sensible... Tan perdido, tan necesitado...Tan desvalido. En fin. Hace unas semanas, viéndolo y observándolo en un programa de la tele, no pude evitar soltar una lagrimita.