Antes del anochecer: el desgaste del amor

Ya tienen unos añitos: Antes del amanecer y Antes del atardecer. No sé si es necesario haberlas visto para disfrutar de la última de esta trilogía sobre el proceso que sigue esta historia de amor muy particular. No sé si el título: Antes del anochecer tiene algo de simbólico, porque asistimos a la fase menos luminosa de la vida en pareja.  Celine y Jesse tienen ya cuarenta años, un hijo adolescente del primer matrimonio de él y un par de gemelas, fruto de la relación entre ambos.

Hay películas que tienen la cualidad de quedarse con nosotros durante un tiempo; historias bien contadas, con un guión bien trabajado, conversaciones jugosas que hacen pensar y que se convierten en la excusa para poder hablar de nosotros entre nosotros.  Y eso es lo que me ha pasado después de ver Antes del anochecer. Llegamos tarde para verla en pantalla grande, pero ya está en el video club de mi barrio y la hemos disfrutado este fin de semana pasado, al calor del brasero en la mesa camilla del salón.  

Escena de la película

El domingo por la mañana, paseando por las hermosas y soleadas playas gaditanas, en pleno invierno, Manolo y yo dimos un repaso a la película.

Chiclana un domingo de otoño

Pero no hablábamos de los protagonistas del film, qué va. Hablamos de los hombres y las mujeres, de todos nosotros; del desgaste del amor, de la época en que resulta más difícil mantener el compromiso del "para siempre" . Yo particularmente pienso que son los años de la crianza de los hijos, entendiendo por crianza, no sólo la infancia, sino incluso la primera adolescencia. Normalmente, esa larga etapa, coincide con los años en que profesionalmente estamos buscando nuestro lugar, con ese también compromiso con una empresa, o con una vocación personal que exige mucho. Algunos más ambiciosos que otros, pero al fin y al cabo, la mayoría queriendo salir adelante, avanzando en nuestro campo profesional y creando las mejores condiciones para el futuro de la familia. 

Un amor de juventud

Ahí es donde aparecen las pequeñas o grandes frustraciones por no poder hacer todo lo que queremos, porque resulta muy difícil compaginar una vida cotidiana cómoda, y dedicar el tiempo necesario a los niños y por supuesto a mantener la ilusión de los primeros momentos de la relación amorosa. Se van abandonando los espacios íntimos,  y todo lo que un día nos atraía y enamoraba del otro, empieza a desaparecer como por arte de magia. Pero no es más que el desgaste de la realidad más prosáica. Así se llega al resentimiento, a la ira, muchas veces contenida, a culpabilizar al otro de las renuncias personales... En fin, quien haya pasado por esta etapa de la vida, seguro que algo le suena. Y aunque difícil, se puede superar, siempre que no sigamos enganchados al ideal del amor romántico, que tanto daño hace a las relaciones con vocación de continuidad.

La película aborda todos estos temas, a través de una simple coversación entre los protagonistas, en un verano caluroso en Grecia, donde sus amigos les ofrecen alojamiento, tardes de coversación, buen vino y deliciosa comida mediterránea. Es por tanto, una película sencilla, que se desarrolla entre la casa de campo de los amigos, la habitación de un hotel y una terraza junto al mar. 

Los que hemos visto a los actores en plena juventud, asistimos a su transformación física. 

Los jóvenes, veinte años antes

Sobre todo ella, una muchacha rubia y hermosísima, hace veinte años, es ahora una mujer cuyo cuerpo revela los años que han pasado y un cierto descuido. No obstante, sigue siendo una mujer guapa, aunque no esté de acuerdo con los actuales cánones de belleza... Un gran tema ese de las mujeres maduras, pretendiendo seguir luciendo un cuerpo de adolescentes.  

Una mujer en plenitud

 Es medio día y volvemos a casa, pero en el camino decidimos pasarnos por uno de los pueblos más bonitos de esta zona: Medina Sidonia. En una terraza, a pleno sol, nos tomamos unas tapas de carrillada ibérica, que se desace en la boca, de tierna y bien hecha que está, y unas croquetas de puchero, con un sabor y un aroma que evoca al cocido de las abuelas. Esas pequeñas cosas nos hacen pensar en nuestros hijos... ¡Cómo disfrutarían tomándose la cervecita!

Antes de anochecer
Dirección: Richard Linklater
Intérpretes: Ethan Hawke, Julie Delpy, Seamus Davey-Fitzpatrick, Jennifer Prior y Ariane Labed.
Guión: R. Linklater, E. Hawke y J. Delpy
EE.UU./2013/108 minutos - See more at: http://www.hoyesarte.com/cine/antes-del-anochecer-o-el-desgaste-del-amor_124234/#sthash.2tzWlIzj.dpuf