Doris Lessing en el corazón

El título de esta entrada no es ninguna frase hecha. La relación sentimental que tengo con esta autora es muy especial. Por eso, me siento triste por su muerte. Siendo yo todavía una mujer joven, me acerqué a sus libros de forma casual. Y me sentí muy impactada por las temáticas que trataba, pero sobre todo por el enfoque, por la mirada tan personal que tenia sobre la vida, las relaciones humanas y las cuestiones sociales. Y ya he seguido su trayectoria. Sobre todo el día que recibió el Premio Nobel fue una gran alegría. Es merecedora de algo así, por supuesto, aunque ella, sencilla y humana, no le dio la más mínima importancia y siguió su vida como si tal cosa.

Doris Lessing tenía una edad ya avanzada: 95 años, así que ha tenido una larga vida y, sobre todo, una vida fructífera desde el punto de vista artístico y también desde su compromiso social, ya que desde muy joven se posicionó al lado de los débiles. Primero en sudáfrica, pais en el que pasó su juventud, y donde luchó por los derechos de la población negra. Luego, a su vuelta a Gran Bretaña, estuvo vinculada a los movimientos culturales y políticos de izquierdas, en un momento muy duro para Europa: la posguerra mundial. En 1954, decepcionada por la politica de Stalin en la Unión Soviética abandonó la militancia en el Partido Comunista. A partir de entonces, Doris Lessing ha permanecido como una escritora independiente, aunque sus obras siempre han reflejado sus preocupaciones por los desheredados, por los diferentes, por la evolución del papel de la mujer en el mundo, etc. En los últimos años, ya anciana y con una vida muy alejada de los oropeles y la fama, vivía recluída en una casa sencilla en Londres y se sentía más cerca del misticismo y el Sufismo, movimiento al que se había vinculado.

Descansa en paz, Doris Lessing. Has sido un referente para muchas de nosotras.

NOTA: Una entrada sobre una de sus obras:
http://laventanadeteresa.blogspot.com.es/2008/08/resumen-del-artculo-sobre-diario-de-una.html