lunes, junio 11

Los sabores perdidos de la huerta

He vuelto a recuperar algunos de los aromas y de los sabores de mi huerta. La cesta que me llega cada semana, repleta de hortalizas frescas, recién cogidas, cultivadas muy cerca de mi casa, sin intermediarios ni cámaras frigoríficas,  que acaban con todo eso que es tan evocador: el olor y el sabor de otro tiempo. Hoy, mientras limpiaba la lechuga, se me ha ocurrido pellizcar un trozo y llevármelo a la boca tal cual, sin aditivo alguno. ¡Santo cielo! Ya no recordaba este sabor... y han venido a mi memoria aquellos días, un poco antes de la llegada del verano, cuando mi madre me mandaba a comprar unos "collos" de ensalada, a una casa, detrás de la iglesia, debajo mismo del antiguo castillo, donde las traían cada día muy frescas y económicas.

Son placeres que se pierden, pero que podemos volver a recuperar.  Una simple coliflor con patatas, al vapor, aderezada con una pizca de aceite, en el que, previamente, he frito unos ajos, y no tiene nada que ver con lo que viene del supermercado.  Eso, y una ensalada,  y no necesito más para sentirme llena. Luego, poco a poco, entro en ese estado de relajación tan agradable, hasta que pasa la hora del calor que ya nos está acompañando por estos lares.   

9 comentarios:

  1. Eso, los collos, que estaban mucho más jugosos y con sabor a huerta.Me gusta la palabreja.Sería cosa de averiguar si es una palabra moribunda o está en activo aún en Sª Mágina.
    Como los productos cultivados por ti, nada.Suerte que lo puedes hacer; yo mientrs tanto me voy a recoger mis collos al Huerto Palacio, debajo de la Plaza.

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  2. Bueno, Manolo ya está comprando las herramientas para empezar a preparar la tierra. Mientras tanto, la cooperativa nos suministra los productos.

    Por cierto, ¿no crees que quizás la palabra original será cogollos y por obra y gracia del lenguaje aconómico se ha modificado?

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  3. Queridas amigas, mis ojos han visto cosas que vosotras no creeríais.

    - He visto judías verdes cocidas cuyas “hebras” eran autentico hilo dental

    - He visto peros (manzanas) que eran pura farfolla, del tamaño de bolas de golf y que acababan en el estomago de los mulos. (Por no hablar de las agrias, pero agrias de verdad)

    - He visto ciruelas que eran auténticos laxantes clase A (sin haber pasado por la agencia del medicamento)

    - He visto pepinos que amargaban de cabo a rabo, por no hablar de la dureza y cantidad de pepitas que tenían, y ningún sabor.

    - He visto melones con cáscaras de 4 cm de grosor (solo para navajas especiales y/o machetes).

    - He visto kakis que ni “pasaos” dejaban de “apligar” y de que manera.

    - He visto almendras “releosas” que te dejaban la boca “acorcha” para un mínimo de 4 horas.

    - He visto collos de lechuga que había que cortar con el escardillo, o sea no aptos para herramientas normales. Las hojas necesitaban un proceso de masticación complejo…

    - He visto berejenas que bien utilizadas producían chichones

    - He visto condiciones sanitarias penosas, fiebres de malta, peste porcina, hígados de conejo empedraos….

    - He visto tomates con hollejos de unos grosores no conocidos en esta galaxia.

    - He visto albarillos (albaricoques) que eran todo hueso –literal-

    - He visto aceituna “endulzás” con un pestazo que echaba pa atrás y la gente decía que estaban buenisimas….

    Tdos estos recuerdos han desaparecido como lágrimas en la lluvia porque afortunadamente hoy por hoy tenemos una calidad en los productos de nuestras huertas y mercados incomparable, con unos estándares Uropeos, en sabor, presentación, variedad, calidad y condiciones sanitarias.

    SOY YO

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    1. ¡Hay que ver, a pesar de ser medio catalán y urbanita, lo que sabes de campo! Pues nada, todos hemos visto de todo. Yo también he vivido en la huerta de mni abuelo algunos veranos de mi últimos años en el pueblo y he visto cómo los bichos se comían la fruta y se tenía que tirar mucha. Pero lo que es innegable es que la que salía buena, no tiene comparación con lo que nos llega de los invernaderos y de las cámaras frigoríficas; lo mismo los tomates... el olor, el jugo... En fin, que la calidad no es sólo cosa de presencia.

      Bueno el vocabulario. A veces se nos olvidan ciertas palabras, como me ha pasado a mí con lo de la lechuga, que de pronto me ha venido lo de collo.

      Hasta otra.

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    2. Jajaja, me río con el comentario de SOY Yo; no podía ser más que de él.Mira no se me ocurre nada más que contarte una experiencia.Por las cruces de mayo, tan populares en Granada, en mi lugar de trabajo se hizo una.En el atrezzo , entre otras cosas, una compañera granaina puso un pero(no manzana) con unas tijeras clavadas en él.Pregunté el significado.Mira la explicación: --a los granainos se les llama los" malafollás" porque a todo le ponen un pero,, les explicas una cosa que a ti te parece maravillosa.Parece que empatiza contigo; tras una ardua explicación por tu parte y tras muchos sudores por transmitirle lo maravillosa que fue la velada, el tío salta :---Sí....pero.
      Bueno, en mi entorno tengo gente como tú y ya sé que tras una fiesta me van a decir:--- Estuvo bien,lo único que falló fue...Bueno, SOY yo, ni tanto ni tan calvo.Ni tan superfeliz como yo, que todo me parece estupendo( nada real, por supuesto)ni tan negro negro, casi color de hormiga, como me pintas la existencia.Pero me río mucho.Seguro que luego disfrutas con el primer pepino amargo que te colocan en el vegetariano de la esquina.Solo es cosa de intentar ver la parte colorista de la vida, aunque estés rodeado de reventaos. Hay que disfrutar de las cosas nimias-Saludos.Juanita.
      .Saludos.Juanita

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    3. Juanita, ¡has dado en el clavo! Felicidades, porque sabes decir las cosas que todos pensamos, eso sí, con gracia, cosa que a mí me hace falta. Que la vida son dos días...

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  4. Doy fe de lo riquiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimas que están!!!, a mi me encantan y tengo la suerte de poderlas consumir también.
    Las fotos muy guapas, parecen un "bodegón vegetal", quedaría bonito para un cuadro!!!.
    Saludos a los/as que se asoman por aquí ;-)

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    1. Pues yo también doy fe que las fotos las he hecho yo con mi verdura recién cogida por Manolo, de la huerta de la cooperativa. Y desde luego no tiene mala pinta, ¿verdad?

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  5. Juanita, a tu comentario del día 13 a las 10:38 ¡¡¡chapeau!!!
    Reitero la felicitaciones de Teresa.
    Saludos.

    SOY YO
    PDTA. ¡¡viva los invernaderos!!

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