jueves, diciembre 1

El agua: ¡cuánto trabajo para mantener la higiene en las casas!

El ambiente de la fuente donde las mujeres iban a recoger el agua para la casa. ¡Qué recuerdos...!
Recogiendo agua en el pilar. Arturo Cerdá
Lástima que el formato no permita una mayor calidad, pero eso no es importante en este caso, sino el documento social.

3 comentarios:

  1. ¡Hola Teresa! ¡Qué razón tienes! Mi madre cuenta, que cuando era joven, existían en el pueblo dos lavaderos: uno para los días calurosos, el cual se hallaba a 2 km. de distancia, y otro para invierno. Llevaban la ropa sobre mulos, ya que mojada pesaba muchísimo. ¡Eso si que era trabajar! Ahora dice que está como una reina con su "criada" (lavadora).

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Pues en este caso era yo la que iba al lavadero, acompañada de mi madre o alguna vecina joven, a unos tres kms. más o menos. La verdad es que entonces me lo tomaba como un juego, porque me relacionaba con las mujeres y me enteraba de los secretillos de los mayores. También iba a la fuente con mi cántaro o con un cubo, porque en la casa no había agua corriente. Era el año 1965 y tenía 14 años.

    ResponderEliminar