domingo, noviembre 22

La homosexualidad femenina y el amor


La belle saison (Un amor de verano) narra la historia de amor entre Carole –interpretada por Cecile de France- una activista y feminista parisina aburguesada y Delphine –Izïa Higelin- una labriega del sur de Francia que nunca ha pisado la ciudad. El guión perfectamente documentado en las etapas de las revueltas feministas, cuya escena dentro de la asamblea en la Sorbona pone la primera mirada a las mujeres como propulsoras de la revolución, cuenta con dos personajes muy bien definidos y que gracias a los diferentes giros del guión y los contrapuntos acabarán formando el desarrollo y la identidad de ambas y encontrando finalmente su propia libertad. Quizá el mayor eje dramático por el que discurre la historia sea la contraposición y la mirada puesta en las diferentes circunstancias que forman la identidad de las dos protagonistas y la pertenencia a dos mundos y tradiciones completamente diferentes.
Delphine, consciente de su homosexualidad y de sentir la necesidad de liberarse del marco patriarcal que define la vida en la granja, se muda a París a trabajar en una fábrica. Allí conoce a Carole que mantiene una relación heterosexual con Manuel y quien le descubre a Delphine el mundo universitario y activista.